Se acerca el año 2025 y en Venezuela se espera un nuevo año electoral. Los liderazgos locales ya se preparan para las elecciones regionales y municipales que se aproximan a la vuelta de la esquina.
Empiezan los cálculos políticos y cada uno comienza a mover sus fichas, a analizar sus posibilidades. Arranca el juego.
En Maracaibo, la segunda ciudad más importante del país, hace apenas unos meses era imposible que alguien pudiese siquiera pensar en aspirar al despacho municipal, ocupado por el alcalde Rafael Ramírez Colina, ahora prisionero político.
Durante los casi 3 años que Ramirez Colina ocupó el cargo -antes de que fuese detenido en octubre-, se dedicó a gestionar la ciudad con una visión de futuro y tratando de recuperar el brillo que alguna vez tuvo. Estamos hablando que restauró servicios públicos básicos como el aseo urbano y el gas doméstico, poco a poco fue restableciendo las rutas de transporte público. Su gestión, transparente por encima de todo, le devolvió a los empresarios la confianza en la municipalidad y Maracaibo recibió nuevas inversiones.
Pero como si esto fuese poco, la ciudad se abrió al mundo. Con una visión cosmopolita, en su gestión, Ramirez Colina no dudó en mirar hacia otras latitudes para intercambiar ideas en áreas como políticas públicas, estrategias de administración y desarrollo social, muestra de ello fue su viaje a Bogotá, donde sostuvo reuniones de trabajo con el alcalde Carlos Fernando Galán.
Nadie dudaba que Maracaibo estaba siendo transformada por una gestión con visión, liderada por un alcalde que, por obvias razones, sobrepasaba el 70% de aprobación.
La lamentable desgracia de Ramírez Colina ahora permite que dirigentes locales aspiren al puesto que dejó vacante. Cuando era percibido como el máximo líder de la ciudad, nadie podía pensar siquiera en la remota posibilidad de arrebatarle el cargo, los marabinos le reconocían su labor y era el hombre que lograría la reelección sin mucha dificultad.
Pero ahora, detenido, incomunicado e imposibilitado de designar un delfín, muchos aprovecharán para pescar en río revuelto y hacerse con la candidatura que hace poco parecía incuestionable.
Cuando la carrera por la jefatura municipal inicie, que no falta mucho, los buitres que sobrevuelan el Palacio, ya habrán olvidado quien respetó los pactos de la Unidad política y quien le devolvió a la ciudad su brillo, su grandeza y su ánimo: Rafael Ramírez Colina.
➨ Artículo escrito por Joel Morales, periodista y activista del partido Primero Justicia
El mejor alcalde q a pasado por la ciudad
ResponderEliminarEsto va para Joel morales, yo me pregunto como puede alguien pensar en elecciones en el 2025 estando aun gobernando nicolas maduro el que piense en esas elecciones es simplemente colaborador del regimen, primero debemos asegurarnos que el 10 de enero del 2025 Edmundo Gonzalez tome posecion del cargo para el cual fue electo por la gran mayoria del pueblo Venezolano, asi que dejen de estar pensando en pajaritos prenados, es mi humilde opinion.
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