Hay razones para ser optimistas porque estamos convencidos que hay una historia y un proyecto por construir en nuestro amado Zulia
El estado de mayor potencial petrolero, universitario, turístico, agropecuario, pesquero, artesanal, cultural e histórico, hoy enfrenta un gran reto, enrumbarse por el camino del progreso, de la sustentabilidad y descentralización de nuestra región o seguir decayendo hacia la miseria y la desidia populista.
Nuestro Zulia, escenario de una de las batallas más decisivas de la gesta independentista, la Batalla Naval del Lago de Maracaibo, denota hoy una gestión que para nada se ha preocupado por recuperar precisamente nuestro majestuoso Lago. La producción de nuestros campos ha disminuido catastróficamente, la pesca en nuestras aguas se ve afectada por la contaminación y la agobiante inseguridad que sufren nuestros pescadores. Nuestros espacios turísticos han decaído en el deterioro y la falta de mantenimiento constante, aunado a esto, la inseguridad que en ellos ronda, aleja a todo aquel que desea contemplar la tierra que nos vio nacer. Las universidades, pisoteadas por los cuerpos de seguridad y la desidia gubernamental, hoy se enfrentan a formar al futuro frente a la destrucción del presente.
El potencial artesanal de nuestras comunidades es impresionante, lamentablemente, la poca conciencia y amor por nuestra cultura ha impedido que evolucionen y progresen. Nuestros artesanos merecen el apoyo de los gobiernos y empresas privadas para impulsar el emprendimiento y fortalecimiento de nuestras raíces. Nuestros espacios históricos se alejan totalmente de las majestuosas historias a las que rinden honor.
Es momento de que los zulianos decidamos si queremos continuar en la oscuridad o ser un estado brillante e imponente como nuestro Relámpago del Catatumbo.
La ciudadanía, consiente de la necesidad por reorientar, concientizar y verdaderamente tomar partido como sociedad en el crecimiento económico, productivo y social de nuestras comunidades, decide por quienes sí tienen un proyecto para cambiar, para progresar.
En América Latina más del 80% de la población ya vive en áreas urbanas. Hoy en una Venezuela convulsionada por el caos y la falta de diseño y planificación urbana, se vislumbra como necesario cambiar la forma en la que se realizan las actividades productivas y humanas de tal manera que se conserven, regeneren y recuperen los elementos del ecosistema, impulsando una convivencia ambiente-comunidad.
La descentralización del poder y de la responsabilidad de los ciudadanos, en las comunidades y en las instituciones, debe ser la herramienta que dé a la gente más poder sobre los servicios que se prestan en su zona y haga a las autoridades locales más responsables.
Asimismo, la reducción de la pobreza urbana y la promoción del rol de las ciudades en el desarrollo sostenible, deben ser la prioridad en la elaboración de políticas públicas orientadas a satisfacer las verdaderas necesidades de nuestro estado. Procurar un relevante desarrollo económico tiene que estar ligado a la expansión de un modelo económico verde.
En tiempos de globalización en el que se acelera el desarrollo urbano en todo el mundo, nuestro Zulia no puede ser la excepción. La movilidad, el uso del espacio público, la innovación, el desarrollo productivo y, lo más importante, la educación, deben replantearse bajo objetivos más amplios que nos permitan avanzar hacia un estado verde y moderno.
Es por todos conocido que las ciudades son lugares de oportunidad, motores de la economía, impulsan el progreso y crecimiento familiar, el desarrollo social y el empleo, la provisión de servicios y bienes fundamentales, la innovación, el progreso industrial y tecnológico, el espíritu empresarial, la creatividad y generan economías de escala.
Maracaibo debe convertirse en una gran metrópolis, verde, moderna y sustentable. Cada una de nuestras ciudades y comunidades pueden progresar con vías modernas, espacios urbanos planificados y calidad de vida para cada uno de nuestros conciudadanos.
Grande como nuestro Lago son las ganas de cambiar y progresar a quien en colas e inseguridad nos han denigrado y humillado. Con mucha fuerza, justicia y voluntad el Zulia será el primer estado de nuestra Venezuela.
Hay razones para ser optimistas porque estamos convencidos que hay una historia y un proyecto por construir en nuestro amado Zulia. Por eso, yo voy con Guanipa, porque en él sí puedo confiar.
Orlando Chacón | @OrlandoChacon_
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