Ir al contenido principal

De la generación de la crisis


Falta menos de una semana para mi cumpleaños número 19, el Martes 5 de Abril cumplo nuevamente un año más bajo el yugo de un régimen que diariamente saquea a Venezuela y la vuelve un país “sin esperanzas ni futuro”, especialmente para los jóvenes y las futuras generaciones que están por venir; realmente no es fácil haber nacido un año antes que Hugo Chávez tomará el poder e hiciera del país un profundo gueto, de hombres y mujeres despistados, muchos atentos pero sin la fuerza necesaria para acabar con ésta era socialista de desgracia y miseria. Venezuela no es la misma y tal vez nunca lo sea, pues espero que aprendamos de ésta crisis y las lecciones que da la historia, esas lecciones de no repetir los errores del pasado y que en el futuro no se conviertan en los errores del presente.

La generación de la crisis sufre, de eso no hay duda, pero llamo al optimismo y la fuerza, llamo a la lucha constante de ideas y conocimientos, llamo al trabajo en unidad y a la construcción de un mejor país, tal vez parezca paradójico, pero de las crisis siempre se saca una enseñanza, una buena lección y un futuro; nada es para siempre, ni el peor de los males aguanta la resistencia de unos ciudadanos comprometidos con salvar a su nación. Ésta vez nos tocó a nosotros, pero fuerza y lucha, porque mañana todo podrá cambiar, y aunque tengamos 17 años en lo mismo, nunca está de más seguir luchando y defendiendo nuestras ideas o dogmas, nunca está de más luchar por el país; el 6 de Diciembre dimos el primer paso, derrotamos a lo que parecía poderoso, mañana podemos devolverle la sonrisa a Venezuela; la generación de la crisis no se queda aquí, es una generación que enseñará al futuro.



Carlos Guerrero / @SrVenezolano.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Grandes personajes de la cultura Wayuu | Francisco Jiménez

L a cultura Wayuu es rica en todos sus aspectos, desde la parte socio-antropológica hasta la socio-cultural. Es interesante ver cómo el sistema de representación de este pueblo integra una serie de deidades importantes en su  universo mítico. La figura central es Maleiwa, Dios creador de los Wayuu y fundador de la sociedad. También están Maa y Juyá, esposos asociados a la generación de la vida. Maa, la madre Tierra, se asocia a la sequía, los vientos y algunos lugares que habita. Juyá, su esposo, es la gran lluvia de esas tierras. A pesar de esta gran majestuosidad y la  importancia que juega esta etnia en la  sociedad, se ha podido ver cómo han ido perdiendo el valor cultural que poseen, pues algunos  indígenas reniegan de sus propios orígenes; olvidándose así del  sentido de pertenencia y logrando de esta forma la deculturación . Cabe destacar que, aunque muchos indígenas niegan sus costumbres, existen  grandes personajes Wayuu que han colocado el nombre de la etnia en

Rocío San Miguel y la asfixia a la sociedad civil | Carlos Guerrero Yamarte

Rocío San Miguel ha sido recluída en El Helicoide, el mayor centrode tortura de Venezuela El fin de semana pasado y los posteriores días de carnaval en Venezuela se convirtieron en horas oscuras para la familia de la activista y presidente de la organización no gubernamental Control Ciudadano, Rocío San Miguel , quien fue arbitrariamente detenida el pasado viernes 9 de febrero en el aeropuerto internacional Simón Bolívar y luego resultó ser víctima de una desaparición forzada al igual que su hija Miranda Díaz San Miguel, dos de sus ex parejas y dos de sus hermanos. Pero la detención de Rocío San Miguel se convirtió en una estruendosa alarma para la sociedad civil venezolana que vio en su desaparición una arbitrariedad más que ha consternado al país y a la comunidad internacional, que volvió a conversar sobre la crítica situación de derechos humanos que atraviesa Venezuela, pues si el régimen chavista decidió silenciar a través de la persecución a una mujer que es experta en temas relac

Es hora de oxigenarse | Carlos Guerrero Yamarte

"El PSUV necesita irremediablemente una pausa, necesita oxigenarse, les urge volver a respirar y reinventarse" El chavismo como movimiento político y social ha fracasado. Es evidente. Pero ha fracasado porque ha decepcionado a sus propias bases; fracasó porque dejó de ser una esperanza para convertirse en una tragedia nacional. Aquel proyecto que en su momento encarnó Hugo Chávez es hoy el gran anatema que pesa sobre millones de personas que vieron en él una posibilidad de superación pero que, gracias a las desviaciones propias del autoritarismo, se transformó en una desgracia que urge detener. Los últimos acontecimientos en el país han dejado en evidencia, por enésima vez, las debilidades propias del sistema gobernante. En primer lugar, el chavismo ha seguido el guión de ruptura que siempre le ha servido para dividir a la oposición democrática, pero en estos momentos parece que no les funcionará; desde el poder han buscado detonar abstención y violencia, pero esta receta no